Antes de salir a correr… Me repito «tú puedes», «vamos a ganar», «eres la mejor».
¿Es la pista la nueva pasarela? El atletismo es un deporte que permite expresar un sentido del estilo propio. Cuando salgo a competir me gusta ponerme guapa para sentirme poderosa y segura. Me maquillo, me pongo extensiones…
Los grandes referentes… Casi siempre son hombres. Todos conocen a Usain Bolt. No sucede lo mismo con ellas. Pero esto está cambiando gracias a velocistas como Allyson Felix, o Shelly-Ann Fraser-Pryce. Espero algún día ser un referente para las niñas pequeñas.
Una meta. Por un lado, graduarme y acabar mis estudios de Medicina; y por el otro, conseguir una medalla internacional.

La primera experiencia al volante… Fue en una carrera en Barcelona. Acabó con un choque. Aunque no me pasó absolutamente nada.
Sobre el vértigo de la velocidad: Cuando subo al coche, lo que más me gusta es obviamente la adrenalina de sentir que vas a 300 km/h.
Moda en las carreras… La influencia del automovilismo trasciende los circuitos. Lo vemos en cada carrera. Son muchos los que vienen al paddock de Fórmula 1 con sus mejores outfits. Y no solo eso, cada vez más marcas de lujo eligen a pilotos para protagonizar campañas.
Tres marcas de La Roca Village: Me quedo con Golden Goose, Sandro y Polo Ralph Lauren.
Color de la suerte: El negro.

Define el trial. Es una filosofía de vida. Al final se trata de vencer obstáculos, como en la vida.
¿Cuándo empezaste? Comencé a ir en moto con cuatro años. A los seis, mi padre me llevó a mi primer trial. Solo recuerdo el barro. Fue desastroso. Pero me enganchó. Al final, es una comunidad muy familiar y el ambiente es súper sano. Compites contra ti mismo.
¿Un reto? La meta es ganar el mundial… Cada vez estoy más cerca. Me motiva ganar títulos y ser un referente para las niñas que suben.
Se necesita… Equilibrio, técnica, y horas de entrenamiento.
El mundo del motor despierta fascinación en el circuito de la moda. Así es. La tendencia Motomami ha dado notoriedad al motociclismo y ha inspirado a muchas chicas, que hoy se sienten atraídas por el deporte. Y eso es importante.
Tres diseños que subirías a una pasarela: Botas, casco y guantes.
Sobre el empoderamiento en el deporte: Queda mucho por hacer. El deporte femenino ha dado un paso adelanto, pero el motor todavía no. Debemos darle más visibilidad.

Justo antes de sumergirte en el agua para empezar una coreografía… Pienso en mi mundo, mi planeta, el agua, y sobre todo, repaso todo lo que he entrenado. Nosotros trabajamos mucho la expresividad para transmitir emociones. Jugamos mucho con los brazos y la interpretación artística, que es clave para conseguir la nota más alta.
Una historia de superación. Sin duda, mi enfermedad, he tenido una artritis reumatoide infantil. De hecho, por ese motivo empecé este deporte. Ahora estoy bien. Pero al principio fue difícil soportar tanto dolor en rodillas y articulaciones.
La natación artística… Exige esfuerzo, mucha disciplina y concentración. Ayuda ir al psicólogo y que tu entrenadora respete también que tienes una vida personal.
Sobre la moda: La moda es importante, te empodera. Al final no es lo mismo para nosotras competir con un bañador que nos queda mal, que nos aprieta, que nos hace sentir pequeñas, que con uno que que nos da poder, que nos da buena imagen.

¿Cómo empezó todo? La primera vez que me puse los guantes fue por casualidad. Tenía 14 años. Me enganchó. No solo quería practicar boxeo, quería dedicarme a este deporte. En mi debut como amateur no era consciente de nada, simplemente sentía la adrenalina, la ilusión de estar ahí.
¿Qué te ha dado el boxeo? Cuando empecé, era una chica muy tímida e insegura. El boxeo me dio confianza. En un deporte de hombres, aprendía a sentirme fuerte y valiente. Cuando me decían “esto no es para niñas”, yo seguí adelante. Y mira, aquí estoy, ¡campeona de Europa! Así que animo a las chicas que quieran probarlo a no dejarse llevar por los comentarios de la gente. El boxeo es empoderador. El boxeo femenino cada vez tiene más visibilidad y me siento muy afortunada de poder formar parte de este cambio.
El mayor reto de tu carrera profesional… Subirme al cuadrilátero del Madison Square Garden. Fui la primera boxeadora española en hacerlo. Perdí el combate, fue mi primera derrota.
La moda en el ring: La moda es muy importante en mi deporte. Hay boxeadores que diseñan sus propias prendas. Hay gente que pone lentejuelas, pelo… A mí me gustan los modelos cortitos.

Esquías enfundada en un traje de látex rojo. Es un tejido que que nos hace más aerodinámicos.
¿El mayor reto? Sin duda, poder controlar la altísima velocidad. ¡Es excitante! Además, somos pocas mujeres. Es una disciplina donde compites con los hombres. Y a veces eso te motiva más.
¿Por qué es la moda importante? La moda muestra cómo es cada persona; y es una herramienta fantástica para sentirse cómoda.
Dos fetiches: Adoro los abrigos y los zapatos.
Un sueño: Llegar a los 230km/h.

Cuando suena el silbato… Me repito que llevo muchos meses preparándome para ese momento y me convenzo de que lo voy a hacer bien.
Un ritual antes de lanzarte al agua: No tengo rituales, pero antes de salir a la piscina, suelo rezar.
Un referente en el deporte: Michael Jordan es el deportista que más me ha inspirado desde niño.
Las marcas del Village que mejor definen tu estilo: Carhartt WIP, Nude Project y Timberland.
Participar en los Juegos Olímpicos… Es un sueño hecho realidad. Las primeras Olimpiadas que recuerdo son las de 2008, cuando aprendí a nadar por así decirlo.

Un ritual de estilismo en la pista: Antes de cada partido, cuando me pongo los patines, comienzo por el pie izquierdo, y me visto de arriba abajo.
Sobre el hockey patines: Es un deporte que exige trabajar en equipo. Es importante transmitir valores como la educación y el respeto.
El hockey femenino: Hay más hombres que mujeres. Pero convertirme en un referente ayuda a que hoy haya niñas pequeñas que quieran practicar este deporte.
Qué consejo le darías a la Aina niña: Que sea valiente, que confíe en sí misma y que luche por lo que más le gusta, porque si persigues tus sueños, a la larga se hacen realidad.

¿Qué te ha enseñado el mar? El mar es un entorno variable que tú no puedes controlar. El mar te enseña a adaptarte porque, por muy preparado que estés, te sorprende. Es una metáfora de la vida: las cosas vienen como vienen y tienes que intentar adaptarte. No siempre todo está en tus manos. Y cuando las cosas no van bien, hay que ajustar las velas.
Un momento inolvidable: Cuando ganamos la medalla olímpica.
Moda y deporte: Hoy en día la moda y el estilismo están presentes en todos los ámbitos. Personalmente, me gusta vestirme de negro para competir, porque transmite agresividad.
Un mensaje de concienciación: Como regatista tengo la suerte de pasar muchísimas horas en el mar, y me impacta ver la cantidad de plásticos que el ser humano lanza al océano. Es necesario concienciar a la sociedad, evitar los plásticos en general, y especialmente los de un solo uso.